1ª parte: Dunia y Daniel

Dunia era una chica introvertida, inteligente y  muy atractiva; además de sencilla, honesta y bastante empática. Todo lo que quería en la vida era un buen hombre que la hiciera feliz y al que también corresponderle igualmente. Pero la vida no se lo había puesto fácil, le costaba hacer amigos, o quizás no eran los adecuados, la mayoría muy interesados materialmente y poco profundos, nada sinceros y siempre buscando jaleo.

Daniel  lo había tenido todo en la vida, no conocia no tener amigos pues tenia en cantidad y donde poder elegir. En cambio, no se sentia cómodo en compañía de éstos.
Algo en su interior cada vez se hacia mas grande, no entendía lo que le estaba pasando. Era tal su desazón que llegó a convertirse en una frustración.
Su frustración hacia que se volviese reservado, sin ganas de nada.
Pronto empezó a salir menos, intentar hacer regularmente algún deporte, distraerse con trabajos de voluntariado…

Las pocas amistades de Dunia no eran nada fructíferas, necesitaba hacer algún viaje, conocer gente, hacer mundo, no sé algo que abriera su mente de algún modo. No podía seguir así. Estaba a punto de terminar bachillerato y aún no sabía que hacer para lograr un trabajo estable que le proporcionara un futuro, estaba harta de no poder pagarse ninguna actividad que desarrollase su personalidad. Quizás un viaje a no sé donde la animase a saber realmente que quería hacer en la vida….

Para Daniel todo le parecía fácil, sin problemas en costearse cualquier cosa que le apeteciese y a dos años de carrera para obtener el título de arquitecto; ya lo eran sus padres pero posiblemete a éstos le hiciese más feliz que a él.